/Nota desde la prensa/
Dos iglesias quemadas, el derribo de una emblemática cruz y la profanación y robo de la eucaristía son algunos de los hechos anticristianos que se registraron el domingo pasado en la localidad de Fontainebleau, en Francia.
Según la agencia Acriprensa, desconocidos incendiaron la iglesia católica Saint Louis, en la ciudad de Fontainebleau, al sur de París en Francia. El sinistro se reportó aproximadamente a las 07:30 cuando se abrieron las puertas del templo.
Autoridades del Municipio indicaron que los autores del incendio amontonaron sillas y alfombras en tres áreas de la iglesia: a los pies de la capilla de Franchard, en la capilla de San José y en el área del coro, consideradas como los bienes más valiosos y simbólicos.
Según la Policía, se presume que se trata de una represalia de unas personas sin hogar que fueron huéspedes en la iglesia y que tuvieron problemas.
El padre José Antonini, párroco del centro misionero de Fontainebleau, detalló que las hostias consagradas fueron arrojadas al suelo, varios objetos desaparecieron y que las estatuas de la capilla de San José estaban colocadas de cabeza, lo que “lleva a pensar que se trató de una profanación”.
Asimismo, el sábado en la noche desconocidos derribaron la emblemática Croix de Guise (Cruz de Guise) que estaba en el bosque de Fontainebleau desde 1563. Durante el gobierno “de terror” de Robespierre fue derribada y volvió a ser colocada durante la restauración en 1827. Este acto se dio el mismo día de los incendios.